14 de septiembre de 2010

La Cráneo Evasión

Y aquí, abandonando el cráneo de un dientes de sable (no éste, sino uno de éstos), tenemos un ejemplar de Homo minusculis al que pillé justo en el momento en que salía de su guarida, quizá en busca de algo de comida con la que alimentar a sus crías... o puede que, simplemente le apeteciera darse una vuelta por el Museo de Orce.


Homo minusculis

4 comentarios:

  1. ¡Hombre, por fin aparece el eslabón perdido! Todos buscábanlo, y es que el pobre iba de cráneo intentando salir de la calavera con mucho ojo...

    Vaya, creo que he superado mi récord de juegos de palabras en una sola frase.

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  2. Perdido o no, gran eslabón... Bon bon eslabón eslabón, eslabón...

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  3. El que ha puesto las dos maderitas, perfectamente escalonadas, se merece un premio. Se podría conseguir adn y clonar uno de estos bichos, aunque sólo fuera para ver como era y poder estudiarlo. Pon más fotos que me gustan mucho.

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